¡Buenos días! Imagino que ya te encuentras descansando, aunque claro, puede ser que hoy te toque trabajar un poco más, pero no puedes negar que el fin de semana tiene una energía especial, y que a pesar de la carga laboral que pudiera haber o los compromisos y las carreras, como que todo resulta más relajado.
Y hablando de labores y oficios, ¿qué representa tu trabajo para ti? ¿es un gusto realizarlo o resulta una pesada carga? ¿en verdad es lo que te gustaría hacer o tan solo es lo que hubo a la mano?
Desde pequeños nos educan para ser "alguien" en la vida, y resulta una presión social enorme y en la mayoría de las ocasiones siembra un "implante" en nosotros de falsas creencias tan poderoso que incluso llega a ocasionarnos conflictos.
¿Qué tan perfeccionista eres en tu trabajo... y en tu vida? Cuando algo sale diferente a lo que habías planeado, ¿cómo te sientes? ¿Cómo asumes tus fallas?
Ahí encontramos un peligro generado por el famoso implante de ser alguien en la vida.
Somos "programados" para estudiar desde pequeños, entrar a clubes sociales, ejecutar un deporte y es nuestro "deber" sacar las mejores calificaciones, cosechar muchas relaciones ya que son puertas que probablemente nos "servirán en el futuro" y de paso ser los mejores en la actividad deportiva.
¡Uffff! No es de extrañarse que los niños cada día lleguen más revolucionados con todo ese paquete que se pone desde el nacimiento.
Sin embargo, esos niños en realidad vienen avanzados en Sabíduria y Espíritu. Muchas veces para recordarnos o enseñarnos lo que hemos olvidado: Somos Únicos y Somos Uno. Por lo tanto, desde que nacemos YA somos alguien y con mucho éxito.
Cuando sé es niño tienes la tarea de llegar a estudiar una carrera, y después una maestría o doctorado porque "el papelito habla". Debes conseguir un buen trabajo aunque no te guste, y con ello viene un excelente sueldo. Después tienes que pasar a encontrar una pareja que te convenga y tenga potencial para ser "buen/a esposo/a", un tiempo más adelante tu deber es tener hijos "porque ya estás en edad y la familia quiere descendencia". Para ello ya tienes una estupenda casa en un lindo sitio y seguro, un par de autos, el tuyo y el de tu pareja. Uno de ellos tiene que cambiarse despúes por uno funcional para los niños. Claro que también debes verte muy bien, saludable, vestirte "a la moda" y con las marcas más reconocidas. De preferencia es necesario que domines por lo menos dos o tres idiomas y que realices viajes al extranjero lo más posible para que seas "culto".
Cuando llegas a estos niveles entonces eres considerado una persona con éxito, y si no has llegado, entonces pasas la vida intentando alcanzar estas metas aunque ya llevas una buena carga de frustración, envidia y depresión porque las cosas no han salido como deberían. Y si lograste alcanzarlo entonces no estás satisfecho/a, comienzas a buscar más cosas con las cuales llenar un vacío que parece no terminarse. Llega la mascota ideal, comienza la lucha contra otros por tomar el puesto siguiente dónde tendrás más responsabilidades pero también más dinero y sobre todo más control sobre otros. Y ni que decir de la vanidad de sentir que puedes conquistar a quien quieras y tener las aventurillas que se te presenten porque tú tienes que ser un éxito en todo.
De pronto, resulta que estás teniendo problemas en tu matrimonio, tus hijos dejaron de ser niños y ahora son unos jóvenes desconocidos para ti, las amigas del cafecito hablan a tus espaldas, por más ejercicio que haces hay otro/a que tiene mejor cuerpo que tú y has subido de peso, el nuevo puesto te mantiene bajo un estrés impresionante, las aventuras resultaron ser una complicación, los idiomas en realidad te sirven para chatear en la computadora con gente de otros países, ha comenzado la expectativa del divorcio y con ello la guerra por la casa bonita y los coches así como ese maravilloso sueldo que tienes y de paso, la mascota ni caso te hace... por supuesto, todos los viajes que realizas ahora son por trabajo y no conoces nada de los sitios a dónde vas porque solo vas de "entrada por salida".
¿Y el éxito? ¿Por dónde se fue? Nadie te dijo que sucedería eso. En el paquete de vida existosa no decía ni en letras pequeñas que incluía una gran carga de estrés, depresión, envidia, coraje, dolor, decepción, miedo y problemas.
¡Qué tremendo implante! Sin embargo, el tiempo de cambio está ya presente y con ello tenemos la oportunidad de modificar cosas en nosotros mismos, sin importar la edad, y el lograrlo crea un impacto en todo nuestro entorno. Es momento ya de deshacernos de esos implantes que nos mantienen encadenados a la creencia de "dime lo que tienes y te diré cuánto vales".
Quizá has escuchado o visto una campaña publicitaria que ha tenido mucho prestigio y que muestra una imagen de la mujer moderna, aquella campaña en dónde dicen: "Soy totalmente..."
Es interesante el impacto que ha tenido pero ¿sabes? esa campaña encierra una realidad, aunque es desviada a la hora de asociarla con el nombre de la tienda.
Desde que nacemos y ahora que tenemos hijos o nietos debemos darnos cuenta precisamente de que "Somos totalmente". Hasta ahí, sin más, por el simple hecho de estar vivos, de estar aquí en el mundo, de despertar cada día pudiendo hacer miles de cosas, por tener el poder de irnos perfeccionando y modificando, por pertenecer a una de las Razas Cósmicas más grandiosas, por tener la capacidad de amar, por tener un mundo físico que se nos ha regalado para ser disfrutado, por estar plenos de sentimientos y emociones, por la comida, la bebida, los colores, olores y sonidos. Por convivir día con día con Hermanos iguales a nosotros, por estar rodeados de infinidad de plantas y animales, por ser asistidos todo el tiempo por seres de mucha Luz. Y sobretodo, por Ser y Hacer, por poder darnos cuenta de nuestros errores y tener en la mano el poder de co-crear algo diferente y mejor, para recuperar esa armonía, esa paz, esa inocencia y ese disfrute por todo lo que nos rodea, amando en verdad lo que somos y a quiénes están con nosotros.
Siempre has sido alguien diseñado/a para ser una enorme Luz en el mundo, un grandioso ser que puede lograr lo que se proponga, más el éxito comienza en el momento en que te das cuenta de que ser exitoso/a no se encuentra afuera, sino dentro de ti y que las cosas verdaderamente valiosas "¡son totalmente...gratis!"
Acción de Hoy: ¿Cuánto has acumulado y qué tan llena en verdad sientes tu vida? ¿Pero cuánto de eso que hoy la llena te hace feliz en verdad? ¿Cuánto de eso es una carga y no algo para disfrutarse?
Reflexiona. Escribe todo aquello que no sirva, que te estorbe. Aquello que en realidad solo funciona para acrecentar tu vanidad y tu ego. Escribe también todas las cuestiones negativas que posees en ti (mal humor, tristeza, coraje, miedo, etc).
Una vez que hayas terminado tu lista repásala y pon sobre toda la hoja con letras grandes y bien marcada la palabra: "Cambio".
Con una vela quema esa lista en el exterior. Una vez se haya quemado, lleva tus manos al corazón y mirando al cielo repite: "Es mi derecho divino recordarme y renacer, hoy decido que el cambio se haga y que mi Esencia vuelva a su brillo para guiar mi personalidad. Padre/Madre, tú conmigo y yo en ti. Así Sea, Es y Será".
Esta oración puede ayudarte mucho si lo deseas, pero no es magia. Comienza cada día, recordando esa lista, a hacer cambios para deshacerte de los estorbos y basura, dentro y fuera de ti. Ahora si, sé verdaderamente exitoso/a.